La culpa no es solo del Oscar

Despúes de darse a conocer la nominaciones al Oscar ha resurgido la discusión en redes sociales sobre la falta de diversidad e incluso el racismo en Hollywood

En días recientes, y después de anunciar las nominaciones de la Academia de Ciencias y Artes Cinematográficas -mejor conocido como Oscar-, resurgió el hashtag #OscarSowhite en Twitter. Infinidad de personas han criticado la falta de representatividad de actores de color –afroamericanos, latinos, asiáticos, etc.- particularmente en las categorías a mejor actor y actriz. Incluso algunas personalidades afroamericanas como la actriz Jada Pinkett y el director de cine Spike Lee han anunciado de manera pública su decisión de boicotear la ceremonia de los Oscares que se llevará a cabo a finales de febrero. Sin embargo, otras tantas personalidades no han estado de acuerdo con boicotear la ceremonia y, en el caso de los latinos, han preferido quedarse callados.

Y es que la realidad es que el problema no es solo la Academia que entrega los premios Oscar sino todo el sistema de Hollywood. No hay suficiente diversidad reflejada en las películas porque quienes mandan en la industria -los ejecutivos, productores, directores, e incluso guionistas y/o directores de casting- la mayoría siguen siendo hombres y blancos, por lo que no solo la industria tiende a ser racista sino misógina. Y eso se ve reflejado en el producto que caracteriza a Hollywood: las películas principalmente, seguidas por la televisión. Hay talento y mucho, de muchos lugares y culturas, pero en muy contadas ocasiones se les da la oportunidad de demostrarlo en producciones de calidad y ahí está el origen del problema. Hoy escuche a una actriz Afroamericana decir que ella no apoyaba el boicot contra la Academia porque al final no llevaba a nada. Y creo que sí, en efecto, tiene razón. Y también dijo que si realmente queremos que las cosas cambien en Hollywood y en la Academia que da los Oscares, debemos de dejar de pagar boletos para ver películas en donde no estamos representados, películas donde no existan personajes latinos, afroamericanos, asiáticos, musulmanes, etc. y sean presentados objetivamente. Y sí, creo que en esto si tiene razón.

El problema no es el Oscar o la Academia, sino Hollywood en su totalidad y para erradicar el problema hay que ejercer nuestro voto como consumidores y dejarle saber a Hollywood que queremos ver más gente como nosotros en las películas y que, si se lo merecen, se les reconozca su trabajo. Que la Academia, y la industria de Hollywood, deje de ser predominantemente masculina y blanca, reflejando la realidad multicultural de EEUU. Porque si Hollywood no cambia, nosotros no vamos a pagar por ver películas que sigan perpetuando ideas estereotipadas que no reflejan la realidad. Se necesita más talento multicultural en Hollywood, pero para que exista, el sistema que hoy en día prevalece debe dejarlo entrar, porque si no el año próximo o el siguiente seguiremos debatiendo lo mismo sobre que racista y misógino es Hollywood.